Así son los taxis alrededor del mundo: los datos más curiosos

El taxi es quizás el medio de transporte más conocido, y uno de los más utilizados, en el mundo pero que puede diferir bastante dependiendo de la ciudad en la que estemos. Conozcamos a continuación como son los taxis alrededor del mundo con los datos más curiosos.

Así son los taxis alrededor del mundo: los datos más curiosos

Muchos son los taxis que circulan en el mundo y aunque algunos de ellos son realmente famosos, por ejemplo los taxis amarillos de la ciudad de Nueva York, lo cierto es que todas las ciudades guardan curiosidades con respecto a sus taxis de modo que os enumeramos algunas a continuación.

Por ejemplo, en Inglaterra, se sabe que los taxis tienen techos muy altos. Eso se debe a que en la antigüedad los ingleses llevaban bombín de modo que los techos de los coches, debían ser altos para que los hombres cupieran dentro sin tener que quitarse el sombrero. Una tradición que se acabó perdiendo para los coches particulares pero que se mantuvo para los taxis.

También en Inglaterra y en concreto en Londres, los taxistas pueden ser considerados los más formados del mundo si tenemos en cuenta que cualquier persona que desee ser taxista, debe estudiar una media de entre 3 y 4 años si tenemos en cuenta que se tiene que aprender las más de 25.000 calles que existen en esta ciudad. Un requisito que se introdujo en 1865 y que no ha cambiado nunca pero que por lo visto compensa ya que una vez conseguida la licencia, pueden elegir cuándo y dónde trabajar y cuánto ganar.

Nueva York es otra de las ciudades que destaca por sus taxis. El amarillo de estos se debe a que por lo visto es uno de los colores más fáciles de distinguir. El origen parte de  Jhon Hertz, fundador de la Yellow Cab Company, que por lo visto leyó un estudio de la Universidad de Chicago sobre como el amarillo era el color más fácil de vislumbrar de modo que eligió que su flota de taxis fueran de este color y de ahí que el resto de taxis de otras compañías acabaran siendo pintados de amarillo.

No ocurre lo mismo en Beijing donde los taxis pueden ser del color que más guste al propietario, por lo que a veces puede resultar complicado distinguir qué es un taxi de lo que no.

Pero volviendo a Nueva York, otra curiosidad tiene que ver con las mujeres taxistas en esta ciudad de Estados Unidos. El primer taxi de combustible que comenzó a circular en Nueva York fue en el año 1907 y no fue hasta 1925 cuando se estrenó la primera mujer taxista de la ciudad. Un dato bastante relevante pero para nada progresivo si tenemos en cuenta que a finales de la década de los 60 solo habían 10 mujeres taxista en toda Nueva York. En la actualidad uno de cada cien taxistas son mujeres.

Japón tiene también datos curiosos con respecto a los taxis. En esta ciudad, la puerta trasera izquierda del taxi se abre automáticamente para los pasajeros. El conductor tiene un botón en la parte delantera que le permite abrir la puerta desde el asiento del conductor.

Y en Finlandia, los taxistas están obligados por ley a pagar una tarifa si ponen música en sus coches mientras transportan a los clientes. Tarifas que pueden rozar los 50 euros al año. En Roma en cambio la curiosidad está en que podemos viajar con personas desconocidas, ya que un taxista puede llevar recoger a varios pasajeros o clientes a la vez.

Pero eso no es nada si hablamos de cifras de taxis en el mundo. Ciudades como Nueva York, París, Londres, incluso Madrid o Barcelona superan la cifra de 10.000 taxis sin problema de media pero hay una pequeña ciudad llamada Tashkent, en Uzbekistán, donde el número de taxis es el mayor de todos si tenemos en cuenta que todos los coches son también taxis ya que cualquier puede llevar a quien lo necesite donde sea y cobrar una tarifa por ello.

El origen de los taxis

Otro dato curioso sobre los taxis en el mundo tiene que ver con su origen ya que los automóviles no se habían inventado todavía pero ya existían los taxis. En concreto, tanto París como Londres a comienzos del siglo XVII, tenían carruajes tirados por caballos como vehículos y la gente podía contratarlos para que les llevaran donde quisieran.

Por último, señalar que la palabra «taxi» que es universal tiene su origen en Londres, cuando se estrenó el primer taxi con combustible a comienzos del siglo XX. La palabra realmente era compuesta ya que era «taxi-cab» que deriva de «taxi» y de «cabriolet». La primera hacía referencia al taxímetro, el instrumento que se usaba para medir la distancia o el tiempo que viajaba un coche, mientras que cabriolet hace referencia  a un carruaje tirado por caballos que se usaba en esos días.